Hermanos, y amigos reciban un saludo lleno de bendiciones; en el Nombre De Jesús.
El volcán del Ruiz en el Departamento del Tolima; país colombia,; empezó a mostrar signos de actividad, con un año de anticipación.
Ese catastrófico día, las cenizas empezaron a caer en Armero a las quince horas, del año 1.989.
Se hizo todo lo posible por tranquilizar a la gente diciéndole que no era grave. Que se pusieran pañuelos en la nariz y se fueran a sus casas,
No se señala ninguna víctima entre las poblaciones que vivían en las faldas del volcán, incluso muy cerca del cráter.
Los afectados fueron los conglomerados alejados del cráter, instalados al borde de los ríos provenientes del Ruiz y generalmente asentados en los valles.
Alrededor de dos mil muertos y destrucciones de algunos barrios en Chinchiná, departamento de Caldas, localizado a treinta kilómetros del cráter.
Alrededor de veintiún mil muertos, cinco mil heridos y destrucción casi total de Armero a cuarenta y cinco kilómetros de distancia..
DATOS TOMADOS DE.:
El fotógrafo Peter Sandstede y de
Robert D.Ercole.
Yo recuerdo la noticia: al amanecer de esa noche catastrófica; un piloto que hacía sobrevuelo por aquel lugar, informó al país de que Armero había desaparecido.
En este año vi unas imágenes por televisión que nunca fueron transmitidas; me perdonan si las habían pasado; a la orilla de una quebrada, o un río donde el agua ya bajaba limpia; yacían más de dos mil partes de cuerpos de seres humanos, recogidos por las autoridades... me impacté mucho...
SALMOS: 103, 15, 16
El hombre como la hierba son sus días;
florece como la flor del campo,
Que pasó el viento por ella, y
pereció
y su lugar no la conocerá más.
TESTIMONIO DE LA IGLESIA DE JESUCRISTO EN ARMERO:
Este testimonio lo escuché del pastor Aicardo Rengijo y de un hermano de apellido Montoya,durante respectivas predicaciones en diferentes congregaciones.
Los hermanos de la iglesia del Señor Jesucristo en Armero, subieron a una colina, se arrodillaron e invocaron ese Nombre que es sobre todo Nombre Jesucristo; y la avalancha con lava que bajaba; se dividió en dos , quedando ellos en terreno seco, y en medio de aquellas dos precipitaciones.
Dios guardó a su pueblo, y a otras personas de aquel lugar que se unieron a los hermanos, ese día fueron salvas de aquella erupción del volcán del Ruiz, un número aproximado de mil personas.
Algunos desobedientes del pueblo de Dios; perdieron su vida ese día...
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